Para muchas Pequeñas y Medianas Empresas (PyMEs), la comunicación organizacional se percibe como un elemento relevante únicamente para las grandes corporaciones. A menudo, estas empresas consideran que la comunicación organizacional no es una prioridad para su crecimiento y éxito a largo plazo. Sin embargo, sucede todo lo contrario, pues la eficacia de la comunicación interna y externa puede marcar la diferencia entre el progreso y el estancamiento.