A medida que un negocio crece, también lo hacen los desafíos asociados con la administración de las finanzas. Sin una solución de gestión financiera integrada y automatizada, el aumento de la complejidad empresarial puede abrumar los procesos financieros y contables existentes, dando lugar a ineficiencias e inexactitudes que pueden conducir a la pérdida de oportunidades y crecimiento.